Él reía, y recreaba su propia pantomima como si estuviese haciendo algo brillante en su generosa exposición de peloteo gratuito y sin mesura, porque evidentemente todos los agradecidos y peloteados aplaudían como pingüinos y el monigote se crecía. Al final cedió la palabra al alcalde de Molina (otro que tampoco le gusta nutrirse de si mismo ¿Sabes?).
Con todo, pagamos 9 euros para ver a un comediante sin talento chuparle el culo a políticos y gente que sí puede aportar algo a su coral, pero bien podría llamarlos por teléfono y ahorrarnos un sufrido calvario. Algo así, lo puedes hacer en tu casa o en la de tus amigos, pero no se debe tener la caradura de hacerlo con un público comercial...
¡No le vuelvo a ver la cara salvo accidente!
Con todo, pagamos 9 euros para ver a un comediante sin talento chuparle el culo a políticos y gente que sí puede aportar algo a su coral, pero bien podría llamarlos por teléfono y ahorrarnos un sufrido calvario. Algo así, lo puedes hacer en tu casa o en la de tus amigos, pero no se debe tener la caradura de hacerlo con un público comercial...
¡No le vuelvo a ver la cara salvo accidente!